¿Por qué somos incapaces de dejar de acumular cosas?
¡No mires a otro lado! Tú también estás inmerso en una sociedad en la que existe la tendencia de dar una segunda e incluso tercera oportunidad a los objetos personales
Guardar y acumular objetos “por si acaso”, hace que desaparezca la ansiedad y el miedo que nos produce deshacernos de algo y que no haya vuelta atrás. El trastero, las zonas a las que damos poco uso o los cajones se convierten en auténticos almacenes de todo tipo de objetos que no utilizamos hasta que un día decidimos hacer una limpieza radical, o nos toca hacer una mudanza. De aquí viene la típica frase que dice:
“No sabes lo que tienes hasta que te mudas”.
Mirar fijamente el objeto repleto de polvo a la vez que recuerdas los buenos momentos con él suele derivar en la mayoría de los casos en un punto de inflexión entre guardarlo o dejar de lado la nostalgia. Si te encuentras en una situación parecida, recuerda en el estudio realizado por la Universidad DePaul en Chicago. Este revela y demuestra que un hogar atestado de cosas impacta negativamente en el bienestar de las personas, ya que provoca estrés.
Yo siempre digo que la tendencia a acumular objetos viene de generaciones atrás. Concretamente del \»por si acaso\» de nuestras madres y abuelas. Una sociedad en la que tenían que vivir con menos y sacar más partido a lo que tenían. Una sociedad que ha quedado arcaica si la comparamos con el consumismo masivo de hoy en día. No obstante mantiene la misma mentalidad cultural de que tirar las cosas esté mal visto.
El resultado de lo anterior se traduce en que no somos conscientes ni del 30% de nuestras pertenecías y perdemos dentro de nuestro desastre cosas que realmente nos importan. Por ello, la coach de liderazgo personal y profesional, Mónica García, recuerda que “cuando salgas a comprar, hazlo de manera intencionada y nunca para aliviar una emoción, evadirte o como diversión o pasatiempo”.
Por último, el consejo que te doy una vez interiorizados los párrafos anteriores es que tenemos a aprender a no acumular. Regirnos por el “menos es más” y por el orden. Y para ello, ¿qué mejor que hacer uso del método KonMari? La solución idónea para poner orden en tu casa, así como en tu vida.
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