Un proyecto de interiorismo de obra nueva que se sitúa en Zumaia y tiene un estilo industrial muy marcado gracias a sus detalles tan personales.
El modo en el que está colocado la televisión en una viga, la zona de trabajo en medio de la cocina, las guitarras como elementos decorativos o el cabecero hecho con palilleria de madera, hacen que sea un hogar muy especial, con mucha personalidad y adaptado totalmente al estilo del cliente.
Además, priman los espacios abiertos, siendo la zona de día el espacio más importante para disfrutar del día a día, ya que es la zona donde más luz natural hay.
Al propietario de la casa le encanta la música y quiere que su hogar sea un refugio para disfrutar de ella y también de los momentos de cena con los amigos. Por ello, le dimos mucha importancia a la zona del comedor y de la cocina, creando un ambiente armonioso y acogedor.